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Diario YA


 

Editorial: "Ellos querrían"

Ellos querrían que las iglesias estuvieran vacías en misa, pero resulta que están llenas. Ellos querrían que no hubiera nadie que escribiese sobre Dios y que conquistase los corazones oprimidos por el ateísmo, pero resulta que cada día somos más. Ellos querrían que resultaran evidentes las bondades del aborto, pero resulta que es un asesinato y la gente está empezando a darse cuenta. Ellos querrían que imperase el Mal, pero Nuestro Padre mueve un dedo y todo se vuelve Paz y Amor.

Ellos querrían que la familia tradicional (padre, madre e hijos) fuese un ente caduco que nadie respetase, pero resulta que no hay cosa que se valore más y mejor que la familia tradicional. Ellos querrían que la cultura de la muerte arrastrase a la tumba a los improductivos ancianos, pero resulta que cada vez se ven más niños escuchando a nuestros mayores y aprendiendo de ellos. Ellos querrían que la cultura homosexual lo inundase todo, pero lo que sólo puede ser minoritario es imposible que inunde nada.
 
Ellos querrían que España fuera una palabra innombrable que diese miedo y evocase demonios del pasado, pero resulta que ya nadie se corta diciendo ante las cámaras lo orgulloso que está de ser español. Ellos querrían que la guerra la hubieran ganado los que en verdad la provocaron, pero resulta que la ganaron los otros. Ellos querrían que su memoria inventada no tuviera resquicios, pero resulta que los españoles están yendo a las librerías y bibliotecas, y están descubriendo la verdad. Porque la mentira nunca triunfa.
 
Ellos querrían que Europa y el Cristianismo no tuvieran nada que ver, pero resulta que tienen todo que ver y la una no se explica sin la otra. Ellos querrían que los separatismos encontraran legitimidad para sus proyectos independentistas, pero resulta que los tiempos generan instituciones supranacionales. Ellos querrían que la Alianza de Civilizaciones fuera un éxito, pero todo el mundo sabe que hay una parte del mundo donde impera la ley y otra en la que manda el fanatismo y la violencia.
 
Ellos querrían que fuéramos mudos para no hablar, mancos para no escribir, ciegos para no ver. Pero resulta que tenemos más Fe que nunca para proclamar la Verdad y para seguir ganando la batalla, igual que hasta ahora. Es posible que ellos sean más…, pero nosotros tenemos al Mejor. Ha sido siempre su principal fallo de estrategia.

Domingo, 19 de Octubre de 2008.

Etiquetas:editorial